Sentados con las manos esposadas detrás de la espalda, algunos ensangrentados, fue como la Policía de Haití presentó a 15 sospechosos colombianos del asesinato del presidente Jovenel Moïse. Mas tarde dos estadounidenses de origen haitiano se sumaron a los detenidos. «Arrestamos a 15 colombianos y a dos estadounidenses de origen haitiano. Tres colombianos murieron y otros ocho están sueltos,» dijo el director de la Policía haitiana Léon Charles. Asimismo el primer ministro Claude Joseph decretó un estado de sitio por al menos 15 días la fiscalía de la capital llamó a declarar a los responsables de la seguridad del presidente. Joseph, primer ministro interino, asumió de forma efectiva tras la muerte de Moïse. Sin embargo, el cargo se lo disputa el político Ariel Henry, a quien Moïse había nombrado para el cargo de primer ministro en el último decreto que firmó antes de morir. En medio de las disputas de poder todo un país se pregunta quién mandó a una banda armada de «mercenarios» a matar a su presidente.
La investigación
Agentes de la Policía haitiana presentaron ante periodistas a los 15 «mercenarios» en la sede de la Dirección General del Poder Judicial, sentados sobre el piso, espalda contra la pared, muñecas atadas con esposas de plástico, varios con ropa polvorienta, uno con el torso desnudo, otro con la chomba desgarrada, un tercero con la cara hinchada.
Más tarde, un grupo de personas capturó a dos extranjeros y los entregó a una comisaría de Puerto Príncipe. Los individuos, luego identificados como los sospechosos estadounidenses, fueron golpeados y uno de ellos estaba ensangrentado a su llegada a la comisaría, según constató un periodista de la agencia EFE. Las personas que atraparon a los extranjeros también entregaron a la Policía dos cargadores de fusil, una sierra y otros objetos. Mathias Pierre, ministro encargado de asuntos electorales, indicó al matutino The Washington Post que uno de los detenidos estadounidenses es James Solages, un ciudadano del sur de Florida.
Charles, el jefe policial, informó que se recuperaron las armas y materiales utilizados por los atacantes. «Cinco autos fueron recuperados. Lamentablemente la gente incendió tres», agregó, refiriéndose a los civiles que siguen de cerca a los policías durante los allanamientos. «Tenemos a los autores físicos (del magnicidio) y buscamos a los intelectuales», aseguró Charles en una declaración brindada junto al primer ministro Joseph sobre los avances en la investigación.
La cifra de muertos en el asalto al palacio presidencial generó distintas informaciones. El jefe policial Charles primero dijo que cuatro atacantes fueron abatidos, tres de ellos extranjeros, y luego redujo esa cifra a los tres colombianos. Sin embargo, medios como el británico The Guardian y el alemán Deutsche Welle, citando fuentes policiales, indicaron que las fuerzas de seguridad haitianas mataron a siete sospechosos tras el ataque al presidente.
La fiscalía de Puerto Príncipe llamó a declarar a los guardaespaldas de Moïse el 13 y 14 de julio anunció el jueves el fiscal jefe de la capital de Haití. «Si eres responsable de la seguridad del presidente, ¿dónde estabas? ¿Qué hiciste para evitarle este destino al presidente?», se preguntó Me Bed-Ford Claude, comisario del gobierno de Puerto Príncipe.
Joseph pidió a la población que se moviliza para buscar a los sospechosos “que sea inteligente” y que los entregue a las autoridades. «Debemos conocer los motivos que llevaron a estos hombres a entrar a la casa del presidente para asesinarlo», dijo el premier interino, que también llamó a la ciudadanía a “regresar a casa” y mantener la calma. «Las Fuerzas Armadas y la Policía tienen el control. Es necesario evitar los problemas. No dejen que nadie nos lleve a una situación confusa», recalcó. El primer ministro además informó que la condición de salud de la primera dama, Martine Moïse sigue “estable” y está hospitalizada en Estados Unidos luego de haber resultado herida durante el ataque.
Pedido a la ONU
Haití pidió apoyo internacional en la investigación del asesinato y también en materia de seguridad. Tras una reunión a puerta cerrada del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas convocada de urgencia para abordar la crisis, Helen La Lime, enviada especial de la ONU en Haití, informó sobre el pedido del gobierno haitiano y pidió más información al gobierno caribeño. «Es importante que estas solicitudes se tomen en serio. Nosotros (la misión política de Naciones Unidas en Haití) estamos ciertamente preparados con los expertos que tenemos para asistir en esta investigación», dijo La Lime por videoconferencia. «Haití tiene que especificar exactamente qué es lo que busca y, mientras tanto, tenemos que seguir usando la asistencia técnica de seguridad que tenemos sobre el terreno», señaló.
EE.UU. ofrece ayuda
Desde la Casa Blanca aseguraron que quieren ayudar en la investigación del magnicidio en Haití pero que todavía nno recibieron petición de asistencia por parte del país caribeño. «Nuestro mensaje al pueblo de Haití es que estamos con ellos, y queremos proporcionarles asistencia», dijo la portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, quien evitó respaldar de forma explícita a Joseph, cuyo cargo actualmente disputa el político Ariel Henry. Sinembargo el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price afirmó que Washington ve a Joseph como el primer ministro de Haití. «Él (Claude Joseph) era el titular que estaba en ese cargo, él estaba ejerciendo como primer ministro antes del asesinato del presidente Moïse y nosotros seguiremos trabajando con Claude Joseph como tal», dijo Price durante una rueda de prensa. También exhortó a Joseph a llamar a elecciones presidenciales y legislativas en la fecha prevista, el próximo 26 de septiembre. Desde este miércoles, Joseph encabezó dos intervenciones del Gobierno ante la prensa y también se encargó de hablar con representantes de la comunidad internacional, entre ellos el secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken.
Puja de poder
Desde la ONU reconocen a Joseph como primer ministro hasta que se celebren las próximas elecciones. Este jueves la representante de Naciones Unidas para Haití, Helen La Lime afirmó que Joseph “es el primer ministro” y que, según la interpretación de la Constitución que él le trasladó, le corresponde a su Gobierno encabezar el país y llevarlo a la celebración de comicios para elegir a un nuevo presidente. Por otra parte, La Lime reconoció que existen “ciertas tensiones” y diferentes interpretaciones de la constitución y pidió un diálogo político.
En cambio el delfín de Moïse, Ariel Henry, dice que el primer ministro es él, pero coincide en la necesidad de un acuerdo político. «Soy el primer ministro designado, Claude era un primer ministro interino que asumió el cargo de ministro de Asuntos Exteriores. Creo que tenemos que hablar entre nosotros. Se suponía que Claude iba a quedarse en el Gobierno que yo iba a formar», se quejó Ariel Henry anoche en una entrevista con el diario Le Nouvelliste. Moïse había nombrado a Henry como primer ministro en el último decreto que firmó antes de morir. «Tendrá que formar un Gobierno de apertura que incluya las fuerzas vivas de la Nación, resolver el flagrante problema de la inseguridad y acompañar al CEP (autoridad electoral) en la conducción de las elecciones generales y el referéndum.”, escribió Moïse el pasado lunes en su cuenta de Twitter.
Henry contó que estaba «eligiendo a los miembros de mi gabinete» y destacó que estaba muy avanzado en la formación del Gobierno. “Necesito continuar, pero en el contexto actual creo que hay una oportunidad de diálogo para llegar a un acuerdo que nos permita ir a un mejor clima en las elecciones y tener un Gobierno que también pueda crear ese clima”, aseguró. Además, afirmó que no quería «echar leña al fuego» y pidió «evitarlo en lo posible mientras el país está encendido».
Estado de sitio
Joseph impuso el estado de sitio por al menos 15 días y además decretó luto nacional por dos semanas. Joseph pidió a la ciudadanía permanecer en sus hogares mientras que los pequeños comercios, estaciones de servicio, bancos, tiendas también cerraron sus puertas. Este jueves, el premier informó que reabrirá el aeropuerto Toussaint Louverture de Puerto Príncipe, que había sido clausurado el miércoles, horas después del magnicidio, y desde entonces sólo permitieron operar vuelos diplomáticos y humanitarios. La frontera con República Dominicana fue cerrada y Bahamas informó que reforzará los controles de seguridad en sus fronteras y además indicó que clausurará su embajada en Haití.
Henry aclaró que no está de acuerdo con el estado de emergencia impuesto por Joseph: «No creo que estemos en una situación que requiera un estado de sitio. Creo que es un poco apresurado,»señaló. La oposición haitiana reclamaba la salida del poder de Moïse con el argumento de que su mandato había concluido el pasado siete de febrero, mientras que el presidente insistía en febrero de 2022 como término de su período de Gobierno. El mandatario no convocó a elecciones desde que llegó al poder en 2017. Acusado de inacción ante la crisis y enfrentado a buena parte de la sociedad civil, Moïse gobernaba el país de 11 millones de habitantes principalmente por decreto.