Desde que empezó la cuarentena, los siniestros viales en Rosario sufrieron una baja muy considerable, con una disminución del 96 por ciento de incidentes que en el mismo período del año pasado, y un descenso del 87 por ciento en las víctimas fatales.
Parece una verdad de perogrullo, pero cuando el flujo de tránsito es menor, hay menos choques. La Secretaría de Movilidad municipal indicó que la semana que pasó hubo, en promedio, una baja del 65 por ciento en la circulación respecto de un día hábil normal, previo al aislamiento, pero en algunos momentos más restrictivos llegó al 75 por ciento.
Cifras aportadas por la Agencia Provincial de Seguridad Vial indican que del 20 de marzo al 30 de abril de 2019, hubo 23 muertes en Rosario en accidentes automovilísticos. Desde que empezó el aislamiento, solo se han producido 3 decesos en las mismas circunstancias, un descenso del 87 por ciento.
El primero de los casos fatales tuvo lugar el 25 de marzo, cuando se produjo un choque entre una moto y un auto en en la intersección de Pacheco y 8 de noviembre, en la zona norte de Rosario, con la muerte del conductor del rodado como saldo.
El segundo episodio fue el 10 de abril, cuando un joven haitiano de 23 años falleció luego de protagonizar un choque mientras conducía su moto. Fue impactado por un colectivo en avenida Francia y Cerrito mientras hacía delivery para una aplicación.
Por último, el 25 de abril un joven de 30 años murió tras chocar con su auto contra una columna en bulevar Rondeau al 4.300, en el extremo norte de Rosario.
No fatales
Los siniestros sin lesionados también se desplomaron. Según datos del Sideat (Sistema Integrado de Denuncias de Accidentes de Tránsito), comparando el período del 19 de marzo al 29 de abril de 2019, se registraron 87 choques, solo un 3,7 por ciento de los registrados el año anterior, cuando fueron 2350.
Es decir, hubo una estrepitosa caída del 96,3 por ciento en los accidentes. Desde el organismo aclararon que puede haber un
subregistro porque las denuncias se están tomando vía web (en www.sideat.com) desde que las oficinas están cerradas, pero de todos modos la disminución es palpable.
Como dato anexo, la desaceleración ya se venía registrando en marzo, donde hubo 11 días de aislamiento y tan solo medio mes de clases. Si tomamos la cantidad de accidentes ocurridos, en marzo de 2019 y en el mismo mes del 2020, comparado por días de la semana, los lunes de este año se produjeron un 51 por ciento menos de colisiones que el año anterior. Los martes se registró una baja del 48 por ciento. Los miércoles, del 58 por ciento.
En tanto los jueves y viernes, días en los que se registran normalmente la mayor cantidad de siniestros, hubo una caída del 64 y 75 por ciento, respectivamente. El sábado, un 73 por ciento. Y el domingo, la jornada en la que siempre hay menos choques, disminuyeron un 51 por ciento. Todos estos valores siguieron bajando notablemente en abril, cuando el movimiento de vehículos fue mínimo.
Desde el municipio, analizaron que “más allá de la reducción de la tasa de mortalidad y lesionados en siniestros, algo que nos pone contentos, vamos a seguir trabajando hasta que no haya ninguno”.
Así se expresó la secretaria de Control Carolina Labayru, quien detalló que desde el comienzo de la cuarentena, su área realizó un total de 301 remisiones de motos y 197 automóviles a personas que circulaban sin el permiso necesario.
“Nos apena y nos pone aún más en compromiso que siga habiendo fallecidos aún con la reducción notable en la circulación. El control y la concientización son las claves para reducir las tasas, aún cuando la circulación vuelva a la normalidad”, se pronunció la funcionaria.
Los efectos que genera la economía en el tránsito
La pronunciada baja en siniestros viales en la ciudad de Rosario no sorprendió a las autoridades provinciales en la materia, como Osvaldo Aymo, subsecretario de Agencia Provincial de Seguridad Vial. “La baja fue muy marcada. El riesgo cero en accidentología vial no existe, porque significa que vos no transites. Por eso, la única manera de bajar a este nivel de muertos y heridos graves en el tránsito es esto que pasó”, apuntó.
Aymo afirma que la actividad económica es la que genera movimiento, lo que termina con una suba de accidentes. “Según el Instituto de Seguridad y Educaciónvial, en 1995 los muertos en accidentes de tránsito a nivel país fueron 10 mil personas. En 2001 y 2002 hubo una baja terrible por la crisis económica, y los muertos pasaron a 7.200. Cuando en el año 2003 hubo una recuperación de la economía, la gente empieza a salir nuevamente, comienzan a aumentar y en 2005 igualamos al 1995 en 10 mil muertes”, graficó.
El médico admitió que, obviamente, parar la economía “es inviable”. Pero aportó un análisis al respecto: “Suecia, que es el país líder en seguridad vial, ha demostrado que el teletrabajo implica la baja en la exposición al riesgo. Ir al trabajo todos los días utilizando un medio de transporte como el auto es exponerse a la posibilidad de un accidente. Esa posibilidad se ve aumentada por ejemplo en una gran ciudad muchas imperfecciones, o distintos modos de locomoción como peatones, ciclistas, motos y colectivos”, explicó.
Entonces, si hoy hay mucha menos gente en la calle ¿Por qué sigue habiendo siniestros fatales? “Porque los que salen siguen saliendo con la misma metodología. Hay camioneros que van distraídos, o que se duermen, y que no respetan las distancias. O automovilistas que chocan solos contra una columna, que muy probablemente manejaba ebrios. En la ciudad tenés el problema de las motos. El delivery es de mucho riesgo,van distraídos con el celular, teniendo que cumplir con tiempos”, ejemplificó el funcionario.